Brian Atwood: Alimentando nuestros deseos

 Ya hace un tiempo que el diseñador Brian Atwood, muy bien acompañado por el gran Tom Ford (diseñador, fotógrafo, gurú y nuevo rey Midas de la moda) hizo una campaña publicitaria muy exitosa, en la que mezclaba erotismo, zapatos y al modelo más perfecto y cotizado del momento, Jon Kortajarena, cuidado que resbalo,  de la cual ya hablé aquí.
Lo cierto es que pese a las criticas de cuatro perras viejas amargadas, sus ventas se cuadruplicaron, y no es de extrañar, ya que en realidad, nos dio lo que queríamos y nosotras se lo compramos, por supuesto.

No me digáis que ninguna ha soñado con un momentazo así, con el chulazo de turno literalmente a vuestros pies, y vuestros pies en las zonas claves del chulazo, porque sois unas mentirosillaaaas.

Pues bien, para la campaña de otoño/invierno de 2012 lo volvieron a hacer ¡Y yo sin enterarme!
Esta vez, sin tirar de rostros conocidos, pero con la misma formula que auna oscuridad, fetichismo, posesión y zapatos de marca.
Sinceramente, me encanta.



Dejando a un lado lo fácil que es vender las cosas haciendo referencia al sexo y los diez bocatas que necesita cada modelo; la campaña, su estética, la fotografía y los zapatos elegidos creo que son realmente buenos y sobretodo, que funcionan en conjunto.
Imagino que como siempre, la polémica se habrá servido en bandejas grandes, pero ¿sabéis? nosotras, animalillos mentales y sentimentales, con deseos y pasiones oscuras encerrados muchas veces bajo llave por vergüenza, somos en muchos casos peores que los hombres. Y eso, los publicistas lo saben y por supuesto, lo explotan.
¡A mí me parece una forma genial de desearos un gran finde!

Besitos que hacen ruidito al andar...



No lo quiero, ¡lo necesito!


A mí no me gustan las botas camperas, ni las cowboy.
Pero ha sido ver estas ridículamente caras preciosidades y me he enamorado perdidamente.
Como no pienso gastarme los 299 euros que la marca Sendra pide por ellas, ni esperar los dos meses que tardan en dártelas, he estado dejando volar mi imaginación y creo que es un modelo perfectamente "cocinable" por alguna persona con un poco de maña y buen ojo.
Los ingredientes serían:
Una bandana.

Un cinturón trenzado negro.
Y por supuesto, unos botines negros, lo más parecidos al "modelo original" (esto es lo más difícil de encontrar).


Se admiten ideas, pistas, sugerencias...QUIERO UNOS BOTINES ASI!!!!!!



Besitos que hacen ruidito al andar...